lunes, 31 de agosto de 2009

Los Molinos. Alcala de Guadaíra





Alcalá de Guadaíra puede considerarse como la primera población andaluza en número de molinos de agua. En la antigüedad era conocida como 'Alcalá de los Panaderos', llegó a contar con 40 molinos entre los siglos XV y XVI, en el siglo XIX se citaban 30 y en la actualidad sólo quedan 24, algunos de ellos abandonados y otros restaurados.

Son muchos los nombres que reciben los molinos aún existentes, nombres como La Aceña, Benarosa, San Juan, El Algarrobo, La Tapada o Realaje. Todos ellos son construcciones relativamente sencillas y, por lo general, de gran antigüedad, aunque la utilización de este tipo de molinos se remonta a los griegos y romanos, la mayoría de los molinos de agua deAlcalá de Guadaíra se remontan a tiempo de la dominación musulmana
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Algunos poseen elementos propios de las edificaciones populares, y muchos de ellos ostentan torres almenadas con finalidad defensiva. Los análisis y estudios sobre documentos históricos indican que la mayoría de los molinos pertenecen a época mudéjar, aunque han sufrido importantes modificaciones posteriores. Muchos de ellos se han estado utilizando hasta la década de los 60, lo que explica su buen estado de conservación.

En los últimos años se están llevando a cabo tareas de recuperación, tanto del río Guadaíra y de su contaminación, como de los molinos destruidos. Con estas actuaciones se pretende recuperar un espacio tan tradicional y característico de la ciudad, cuyo sustento principal durante muchos años han sido los molinos y la molienda de grano
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Desde el molino de la Aceña, situado al este de todos, hasta el molino de la Adufe, la Ruta de los Molinos constituye un paseo obligado para los visitantes de Alcalá.
Molinos más importantes:
- La Aceña: De los conservados, posee los restos materiales de más antigüedad, junto con el del El Algarrobo. Con una estructura constituida por dos piezas, como la mayoría de los molinos alcalareños, consta de una parte de almacenamiento del grano y la harina y estancia del molinero, y la sala de moler, más alargada y baja. La estancia del molinero podía estar construida en forma de torre, por su afán defensivo y la sala de moler podría tener varias piedras destinadas a este fin.
El emplazamiento de este molino, es en la actualidad un lugar idóneo para el descanso y el disfrute de toda la familia.
- Benarosa o Benaharosa: Las primeras referencias a este molino las encontramos en el Repartimiento de Sevilla del año 1252. El molino conserva una estructura de tres cuerpos. El primero de ellos es la sala del molino, con una cubierta a dos aguas. También posee una dependencia o entradilla, así como una torre con un segundo piso para el almacenamiento del grano. Además posee un pequeño puente realizado con solería de piedras y guijarros.
- San Juan: Situado en las inmediaciones del molino de Benarosa. Cuenta con una larga historia ya que sus orígenes se remontan a la época de la reconquista cristiana de la ciudad en 1246. Este molino estuvo en funcionamiento hasta la mitad del siglo XX, cuando fue abandonado para pasar a otras técnicas más mecanizadas de molienda de grano. El molino ha sido restaurado y actualmente se encuentra dentro de la Ruta de los Molinos.
-El Algarrobo: Situado a escasos 300 metros del centro de Alcalá, es uno de los más antiguos que se conservan en el Guadaíra y ha sido recientemente restaurado. El Algarrobo es un molino musulmán que disponía de una torre para su defensa.
- La Tapada: Este molino utilizaba para mover sus piedras el agua procedente de un arroyo, y no del mismo río, aunque esté situado junto a él. En la actualidad se encuentra restaurado y constituye junto a los demás, un enclave ideal para dar un paseo por las orillas del río Guadaíra. Se ha fechado su origen en la época bajo medieval, entre los siglos XIV y XV. Además tras los procesos de restauración del molino se han encontrado en una cara de su fachada, pinturas de época tardo-barroca, que conformarían en la actualidad el único ejemplo de este tipo de pinturas en un molino alcalareño.
- Realaje: Este molino destaca por poseer una cúpula que descansa sobre cuatro trompas, construidas sobre ladrillo. Una nave inmediata cubierta por una bóveda de cañón completa el conjunto arquitectónico del molino de Realaje. La nave debió construirse a principio del siglo XVII, según reza en la inscripción exterior. El sistema de molienda y el espacio destinado a ello tiene una clara proveniencia mudéjar.
Este molino posee una torre poco habitual en la arquitectura molinera, con una torre más baja de lo normal, almenada y que en su parte superior forma una amplísima azotea. Es un ejemplo singular de arquitectura civil rústica.
El río de la vida, la vida que Alcalá, la del Guadaíra a través de sus panaderos y su molinos supo transmitir a Sevilla, primero, fue el agua, a través de los caños de Carmona, luego fue playa de Sevilla, después el pan, la tradición culinaria más común en las mesas sevillanas y españolas, en general, y hoy aspira a convertirse en una de las vías verdes y parque natural de todo el entorno metropolitano, la ruta de los molinos, el pinar de Oromana, el parque de rivera, merece la pena pasear las orillas, de un río, en vías de recuperación ecológica, que cuenta con el primer puente figurativo, el Guardián del Castillo, es algo especial que merece la pena conocer.

EL PALACIO DE LOS MARQUESES DE VIANA



El Palacio de los Marqueses de Viana es un dificio del siglo XIV. Su fachada principal fue realizada por Juan de Ochoa, de estilo manierista, durante el siglo XVI, Ha tenido a través de los años numerosas restauraciones y ampliaciones, ha habido hallazgos arqueológicos, creyéndose que en un principio fue un edificio romano.
La publicación de un anuncio en la revista francesa Jours de France ofreciendo la venta de un palacio del siglo XV en Córdoba, motivó en la ciudad un movimiento general de repulsa.
Haciéndose eco del sentir popular, la Caja Provincial de Ahorros de Córdoba inició conversaciones con la propiedad que culminaron el 2 de julio de 1980 con su adquisición.
Tras efectuar las necesarias obras de restauración y acondicionamiento a su nueva función, la Obra Social y Cultural de la Caja lo abrió al pueblo de Córdoba como museo el 31 de octubre de 1981.
Ofrece una serie de colecciones distribuidas por sus salas:
La Galería de los Azulejos, con el suelo pavimentado con mosaico romano y una colección muy importante desde el siglo XIII.
En el Salón de las Artes, con pinturas murales con representación de los cinco continentes.
Tiene una biblioteca con más de siete mil volúmenes, y colecciones de tapices flamencos y goyescos; guadamecíes; platería cordobesa; alfombras; arcabuces; muebles del siglo XVII; porcelanas etc.
Una de sus grandes atracciones son sus hermosos patios, en total doce, unidos entre sí por galerías, con gran diversidad de plantas.
Ha sido declarado, por real decreto en 1981 "Monumento Histórico Artístico Nacional" y por otro real decreto en 1983, se declara "Jardín Artístico".

Visitar el Palacio de los Marqueses de Viana es uno de los pequeños placeres, que el viajero que visita Córdoba, puede obtener, cualquiera de sus doce patios, donde el sonido del agua, los aromas de la primavera, embotan los sentidos, merece ser visitado, sin prisas, poniendo los cinco sentidos al servicio del buen recibir, porque las sensaciones que se perciben en cada rincón, ora el aroma del azahar, ora, el sonido cristalino de las fuentes, ora el colorido y los contrastes de la blanca cal. con los verdes los rosas, rojos, la luz, el sol en la piel, sentarse a la sombra de un frondoso naranjo, para disfrutar las luces que se ensortijan entre las verdes hojas, y los reflejos en las fuentes, como parecen jugar con las paredes.

Puede juzgárseme de parcial, pero, garantizo a cualquier viajero, sin las prisas de un turismo irracional, que visitar elPalacio de Viana, despertará en sus sentidos, sensaciones de antaño, placenteras, que le harán recordar la visita como un momento in usualmente bello y hermoso, que pervivirá en sus retinas y memoria.